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Filetes de marrajo (Isurus oxyrinchus) a la venta en una pescadería. Foto: Isaías Cruz. |
1. El tiburón más peligroso es el tiburón muerto.Los tiburones son más peligrosos en el plato que en el océano, muertos y cocinados que vivitos y coleando; o si lo preferís, abundando en la paradoja (que lo es sólo en apariencia), cuando son comidos más que cuando son ellos quienes salen a comer.
Cada vez se publican más estudios que alertan de la presencia de contaminantes en diversos organismos marinos. Y no cualquier tipo de contaminantes. Hablamos de plásticos, de hidrocarburos, de pesticidas, de DDTs, de PCBs (1), así como de mercurio y otros metales pesados, que se encuentran en concentraciones cada vez más elevadas en los tejidos de especies que, por si fuera poco, nos sirven de alimento.
El caso de los túnidos y de los tiburones es particularmente grave, al tratarse de animales en general de gran talla que se encuentran en lo más alto de la red trófica marina, desde donde recogen, como si aplicasen la boca al caño de un desagüe, todos los contaminantes que sus presas más pequeñas han ido acumulando a lo largo de sus cortas o largas vidas. Existe una relación proporcionalmente directa entre el tamaño y la posición en la red trófica de un determinado organismo y el grado de acumulación de sustancias tóxicas en su interior (2). O sea, comerse a un súper depredador es jugar a la ruleta rusa.
2. El circuito del envenenamiento.Toda la porquería que lanzamos al mar en un momento u otro nos va a ser devuelta, y además de la peor manera posible: nos la vamos a comer, con patatas o si ellas, y además concentrada.
Todas estas sustancias altamente tóxicas llegan al océano bien de forma directa, en los vertidos de residuos urbanos e industriales sin tratar y en los procedentes de las distintas actividades a bordo de los buques, como la limpieza de tanques, etc.; o bien, de forma indirecta, por lixiviación, transportadas por las corrientes, el aire, los ríos, y otro etc. Por otro lado, la presencia de contaminantes como el mercurio en el medio marino no es atribuible exclusivamente a factores antropogénicos, sino naturales, como la actividad volcánica.
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Foto: Greenpeace. |
Una vez disueltos en el agua, la incorporación de estos productos tóxicos a la cadena trófica es inevitable y sencilla. Puede hacerse, por ejemplo, por ingesta directa o por absorción a través de las branquias. Algunos organismos no tienen capacidad metabólica para eliminarlos, a consecuencia de lo cual se acumulan dentro de su cuerpo hasta llegar a alcanzar concentraciones superiores incluso a la del medio (
bioacumulación). Una forma particular de bioacumulación es la llamada
biomagnificación, cuya consecuencia es que un organismo lleva encima la carga contaminante de sus presas y de las presas de sus presas. El pez chiquito
—contaminado
— sirve de comida, solo o acompañado de un puñado de congéneres
—también contaminados
—, a un pez un poco mayor, el cual, igualmente solo o acompañado por unos cuantos colegas
—contaminados—, será devorado por otro más grande, quien finalmente acabará como ingrediente de la papilla alimentaria "metalizada" contenida en el estómago de un atún rojo o de un cailón. Las concentraciones de elementos tóxicos en los organismos más próximos a la base de la cadena alimentaria son así inferiores a las de aquellos que se encuentran en o cerca del otro extremo.
Pero los venenos llegan también por vía materna, como han venido a demostrar, entre otros, recientes estudios sobre crías de un año de diferentes especies de lamniformes como el marrajo (
Isurus oxyrinchus), el tiburón blanco (
Carcharodon carcharias), el cailón salmonero (
Lamna ditropis) o el zorro (A
lopias vulpinus) (3): sus elevadas tasas de mercurio, PCB, etc., sólo podían explicarse si habían llegado hasta ellas dentro del seno materno. Herencia envenenada propiamente dicha.
Como ya os podéis imaginar, todo este circuito letal se cierra cuando el pez
—ultracontaminado
— cae en una red o un anzuelo, y de ahí pasa al estómago, el cerebro, el hígado y las más diversas vísceras del ser humano que lo consume.
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Ciclo del mercurio. Fuente: Wikimedia. |
3. Unos cuantos casos que dan que pensar. El 30 de noviembre pasado Helmut Nickel publicaba en
Shark Year Magazine un interesante artículo en el que recopilaba 34 notificaciones sobre productos de tiburón realizadas por diferentes países de le EU entre febrero del 2012 y el 11 de septiembre de este año en el marco del Sistema Europeo de Alerta Rápida para Comida y Piensos (RASFF, en sus siglas en inglés). Y los datos son sobrecogedores. Para que os hagáis una idea, si en la UE el nivel máximo de mercurio permitido es de 1 mg/kg de peso húmedo, en un marrajo procedente de España se encontró la increíble cifra de 8,61 mg/kg. Recordemos que el mercurio, particularmente el metilmercurio, es una potente neurotoxina con efectos gravísimos e irreversibles en los fetos y los niños. Aquí tenéis los datos, que he agrupado por especies (entre paréntesis el país de origen de cada partida):
Marrajo (Isurus oxyrinchus): Contaminación por mercurio
-8,61 mg/kg en rodajas congeladas (España).
-5,6 mg/kg en producto congelado (Japón vía España).
-5,47 mg/kg en rodajas congeladas (Singapur).
-3,7 mg/kg en producto descongelado (España).
-3,5 mg/kg en producto congelado (España).
-3,5 mg/kg en descongelado (España).
-2,6 mg /kg en producto refrigerado (España).
-2,4 mg/kg en congelado (España).
-1,2 mg/kg en congelado (España).
-1,15 mg/kg en producto refrigerado (España).
-1,15 mg/kg en congelado (España).
Tintorera (Prionace glauca): Contaminación por mercurio
-3,33 mg/kg en filetes congelados (España).
-2,6 mg/kg en congelado en (España).
-1,89 mg/kg en congelado (España).
-1,6 mg/kg en rodajas congeladas (España).
-1,58 mg/kg en congelado (Vietnam).
-1,4 mg/kg en congelado (Vietnam).
-1,389 mg/kg en congelado (España).
-1,35 mg/kg en congelado (Vietnam).
-1,3 mg/kg en congelado (China).
-1,3 mg/kg en congelado (España).
-1,3 mg/kg en congelado (Vietnam).
-1,25 mg/kg en congelado (Portugal).
-1,159 mg/kg en filetes congelados (Ecuador).
Pintarroja (Scyliorhinus canicula): Contaminación por mercurio
-2,3 mg/kg en producto refrigerado (España).
-1,903 mg/kg en producto refrigerado (Croacia).
La lista incluye cuatro notificaciones de cargamentos de mielga (
Squalus acanthias) importados de los EEUU con altas concentraciones de PCBs, y una de un
Squalus sin identificar procedente de Malta con 2,1 mg/kg de mercurio. Igualmente dos partidas de tiburón lechoso (
Rhizoprionodon acutus) que venían de Yemen con 0,76 mg/kg y 0,67 mg/kg de cadmio.
Por último un dato que no sabría si calificar de gracioso o de deprimente: la noticia de un cargamento de 1200 kg de filete congelado de
megalodón procedente de China (no es broma, en la etiqueta figuraba su nombre científico y todo:
Carcharocles megalodon) que se pretendía hacer entrar en Italia. Como es natural, las autoridades rechazaron la importación y la partida fue destruida.
Marrajos y tintoreras están entre las especies más contaminadas, independientemente de su procedencia y del sistema de conservación, congelados o refrigerados.(4)
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Foto: Isaías Cruz. |
4. Conclusiones.Primera: No comáis carne de tiburón, particularmente de marrajo y de tintorera. Además de cuidar vuestra salud y la de los vuestros (mucho ojo con los niños y las mujeres que están embarazadas, creen estarlo o lo estén buscando), dejaréis de ser partícipes del sangriento proceso que está empujando a muchas poblaciones de estos animales al borde del colapso.
Segunda: Si no podéis o no deseáis prescindir totalmente de ello, es recomendable moderar el consumo de tiburón y de otras especies como los túnidos. Es también recomendable que consultéis a un especialista (desconfiad siempre de la palabra de los políticos) sobre dosis recomendables, etc., aunque en la red también es posible encontrar información rigurosa. (5)
5. Una más: ¿Spain is different también en esto?Dos datos: Primero, el 47 % del total se referían a tiburones procedentes de nuestro país; segundo, la inmensa mayoría de las notificaciones fueron emitidas por autoridades italianas.
El primero en si mismo ni es una novedad, ni debería ser preocupante, al fin y al cabo somos la primera potencia pesquera de Europa. En cuanto al segundo, alguien podría aducir que lo que les pasa a los italianos es que nos tienen envidia cochina (un modo de ver las cosas típicamente español).
Pero, claro, uno no deja de pensar que aquí también nos comemos los tiburones que pescamos... y llama bastante la atención que no haya habido ni una sola notificación emitida por España...
... Y así resulta que teniendo en cuenta el modo en que nuestros políticos se han preocupado tradicionalmente por la salud (y el bolsillo) de sus votantes... estos datos tomados en su conjunto le ponen a uno los pelos de punta.
Está claro: EL TIBURÓN, MEJOR FUERA DEL PLATO.
[Más información sobre el consumo de tiburones, el consumo no deseado, en el post
El tiburón que nos comemos sin querer.]
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(1) Los policlorobifenilos (PCBs) son compuestos sintéticos altamente tóxicos que se emplean como refrigerantes y lubricantes en transformadores y otros equipos eléctricos, como fluidos hidráulicos, etc. Pueden provocar "disfunciones inmunitarias, neurológicas, alteraciones hormonales, del desarrollo, trastornos neuroconductuales, etc., también están clasificados como posibles carcinógenos humanos y tóxicos en la reproducción." Véase página del Registro Estatal de Emisiones y Fuentes Contaminantes (PRTR España). (2) Como ejemplo, un artículo que acabo de encontrar sobre la presencia de mercurio en peces de la zona norte del Golfo de México, alerta de altas concentraciones de mercurio (entre 1,08-10,52 ppm) en la aguja azul (Makaira nigricans), la bacoreta (Euthynnus alleteratus) y diversas especies de jaquetones del género Carcharhinus.Yan Cai, Jay R. Rooker et al. "Bioaccumulation of mercury in pelagic fishes from the northern Gulf of Mexico". Canadian Journal of Fisheries and Aquatic Sciences, febrero 2007; 64(3), pp. 458-469.Es también recomendable la lectura del informe del Biodiversity Research Institute y el IPEN, de enero de este año, titulado Global Mercury Hotspots: New Evidence Reveals Mercury Contamination Regularly Exceeds Health Advisory Levels in Humans and Fish Worldwide ['Pruebas recientes revelan que en todo el mundo la contaminación por mercurio sobrepasa regularmente los niveles aconsejables para la salud en las personas y en los peces']. (3) Véase estos dos trabajos de libre acceso; el primero centrado en PCBs y DDT, y el segundo en PCBs, DDT y mercurio:-Christopher G. Mull, Kady Lyons, Mary E. Blasius et al. "Evidence of Maternal Offloading of Organic Contaminants in White Sharks (Carcharodon carcharias)."PloS ONE 8(4): E62886, 2013. -Kady Lyons, Aaron Carlisle, Antonella Preti et al. "Effects of trophic ecology and habitat use on maternal transfer of contaminants in four species of young of the year lamniform sharks."Marine Environmental Research, 90 (2013), pp. 27-38.(4) Por supuesto, no sólo figuran los tiburones entre las especies más contaminadas. A modo de ejemplo, ved esta lista de récords en los niveles de mercurio: -Marlin o pez vela no identificado (fam. Istiophoridae): 7,4 mg/kg -Pez espada (Xiphias gladius): 4,95 mg/kg. -Seriola no identificada (Seriola sp.): 2,65 mg/kg -Atún no identificado (Thunnus sp.): 1,7 mg/kg -Meluza del Cabo (Merluccius capensis): 1,56 mg/kg -Escolar (Lepidocybium flavobrunneum): 1,36 mg/kg (5) A quienes todavía no tengan claro el asunto, les propongo la siguiente reflexión: ¿alguien se animaría a tomar con toda tranquilidad unas chuletitas o un plato de callos hechos con alguno de estos cerdos? Y sobre todo, ¿dejaríais que vuestros hijos lo hicieran?__